Me ha hecho mucha ilusión ver un comentario que me ha dejado Arispiq que está intentando dejar de fumar. A ver, que no soy Mercedes Milá ni intento ninguna campaña, pero estoy realizando un verdadero esfuerzo porque a mí me gusta fumar y no me sienta mal aparentemente, no tengo tos ni me cuesta respirar. Pero si mi esfuerzo sirve para que alguien más lo deje (ya sabéis, mal de muchos…) me alegro y nos animaremos mutuamente, porque no es nada bueno para la salud. En realidad yo creo que lo dejo porque odio que me prohíban cosas y el año que viene no va a poder fumar nadie en ningún sitio; espero que no prohíban más cosas porque nos vemos con la ley seca como en EEUU, gánsters incluidos.
Ayer hice un mes sin tabaco y he dejado de tomar las pastillas y, dejando a un lado que están subiendo las temperaturas de mala manera, estoy maravillosamente.
El viernes estuve haciendo el vago, que es lo que me gusta hacer en vacaciones, eché un par de siestas, jeje, y después de la última me duché y me fui a bailar hasta las 4. Ayer vagueando todo el día y marcando mi propio horario: comí a las 7 de la tarde y cené en dos tandas, a las 10 y a la 1,30 de la madrugada.
Mañana ya llega mi hija mayor y pasado la peque, así que se acabó el vivir sin horario, pero ya las echo de menos y nos quedan 3 semanas para hacer cosas. De momento esta noche saldré un rato.